Morante
Pena Capital
Los cuatro muros se acercan agudamente,
buscando apresurar
algo que no se puede evitar.
Abrir los ojos y en plena oscuridad
las l�grimas saltar�n,
ya no hay m�s que rezar.
M�s no me arrepiento s�lo buscaba el saber,
y no me arrepiento, el precio es perecer,
mazmorras malolientes testigos de la injusticia,
del miedo de un sistema que sirve a la bestia,
es el inquisidor inicuo, cerdo, ignorante,
un falso profeta, su placer es s�lo matarte.
Los negros verdugos me conducen a la hoguera,
donde arder� mi cuerpo,
donde arder� todo mi ser.
Y el pueblo ciego enga�ado con vileza,
celebra paganamente,
con majestuosa fiesta.
M�s no me arrepiento s�lo buscaba el saber,
y no me arrepiento, el precio es perecer,
mazmorras malolientes testigos de la injusticia,
del miedo de un sistema que sirve a la bestia,
es el inquisidor inicuo, cerdo, ignorante,
un falso profeta, su placer es s�lo matarte.
Yo te condeno al fuego eterno por brujo y hereje.
Am�n.